En los próximos cinco años se venderán 133 millones de la octava generación de consolas de videojuegos, que se presentaron a inicios del 2013.Esto es menos que los cerca de 140 millones de la séptima generación de consolas que se vendieron durante el mismo período tiempo atrás.
Es la estimación de ABI Research, que asegura que las nuevas consolas de Microsoft (XBOX One) y Sony (PS4) tendrán que apostar al contenido como el principal medio de diferenciación.
Esto sobre todo ahora que nuevos participantes, como Ouya, se unirán a la competencia con precios bajos y juegos que ofrecen experiencias destinadas a capturar jugadores no extensivos.
Aseguran que las nuevas consolas basadas en el sistema Android están encontrando un nicho, pero que, para ser exitosas, necesitan bibliotecas de juegos diferenciadas de los disponibles para dispositivos móviles.
En cuanto a la consola de Nintendo, señala que difícilmente la Wii U podrá igualar el éxito de la Wii, a menos de que cambie la estrategia de sus juegos y el precio.
“El futuro de las plataformas de videojuego depende del lanzamiento de juegos atractivos y menores precios que calcen dentro del presupuesto doméstico de compras discrecionales y regalos”, dijo Sam Rosen, director de la consultora.
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